jueves, 1 de octubre de 2015

Santa Teresa del Niño Jesús.

Frases extraídas del libro de las obras completas (cartas, manuscritos autobiográficos, oraciones, etc...) de santa Teresa de Lisieux.

-"No pido amor sensible sino un amor conocido sólo de Jesús".

- "Dios es más tierno que una madre".

- "[...] Dios está muy lejos de llevarme por el camino del temor. Sé encontrar siempre la forma de ser feliz y de aprovecharme de mis miserias..."

- "Nadie, Amor mío, tenía ese derecho sobre ti, y sin embargo obedeciste, no sólo a la Virgen Santísima y a san José, sino hasta a tu mismos verdugos. Y ahora te veo colmar en la hostia la medida de tus anodanamientos. ¡Qué humildad la tuya, Rey de la gloria, al someterte a todos tus sacerdotes, sin hacer distinción alguna entre los que te aman y los que por desgracia, son tibios y fríos en tu servicio...! A su llamada, tu bajas del cielo; (...) ¡Que manso y humilde de corazón me pareces, Amor mío, bajo el velo de la blanca hostia! Ya no puedes abajarte más para  para enseñarme la humildad". 

- "[...] he vuelto a cometer muchas faltas de orgullo. Al ver esto me tienta el desaliento, pero sé que el desaliento es también una forma de orgullo. Por eso quiero Dios mío, fundar mi esperanza sólo en ti. Ya que tú lo puedes todo, haz nacer en mi alma la virtud que deseo".

- "¿Y cómo amó Jesús a sus discípulos, y por que los amó? No, no eran sus cualidades naturales las que podían atraerle. Ente ellos y Él había una distancia infinita. (...) Quiere verles reinar con Él en el reino de su Padre, y para abrirles las puertas de ese reino, quiere morir en la cruz, pues dijo: Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos". 

- "Sí ahora comprendo que la caridad perfecta consiste en soportar los defectos de los demás, en no extrañarse de sus debilidades [...]"

- "[...] la caridad no debe quedarse encerrada en el fondo del corazón. Nadie, dijo Jesús, enciende una lampara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de la casa. Yo pienso que esa lampara representa la caridad, que debe alumbrar y alegrar, no sólo a los que me son más queridos, sino a todos los que están en la casa, sin exceptuar a nadie".

- "[...] no me sorprendo ya de nada ni me aflijo al ver que soy la debilidad misma; Al contrario me glorío de ello [...] Acordándome que la caridad cubre multitud de pecados, exploto esta mina fecunda que que Jesús ha abierto ante mi".